diumenge, 2 de desembre del 2012

Preguntas sobre el acto II


1. Hay dos intervenciones de Calisto en las que parece arrepentido de haber puesto su negocio en manos de Celestina pagando para ello cien monedas de oro. Búscalas

1. CALISTO
Porque Calisto pregunta a Sempronio y Pármeno (sus criados) si ha hecho bien de dar cien
 monedas a Celestina para que resuelva su dolor amoroso.
“Hermanos míos, cien monedas di a la madre; ¿hice bien? “

2. CALISTO
Porque Calisto dice a Pármeno que él le ha recomendado a Celestina a pesar de ser su enemiga y
que por este motivo le ha pagado 100 monedas a esta trotaconventos en lugar de 5 a otra
desconocida.     

      2.Explica brevemente el concepto de honor que Sempronio expone a Calisto
Sempronio cree que no hay mejor honor (honra) que compartir los bienes mundanos (el dinero) porque el que da es más grande que el que recibe. Siente que le tratan diferente (porque tiene más poder) pero él quiere que le traten igual que todos: generosidad.  

      3.El amor de Calisto es un amor aprendido en los libros y este personaje se conduce conforme a lo que ha leído: busca las palabras de Calisto y de Sempronio que corroboran la afirmación anterior

CALISTO
Calisto ha leído a Ovidio en Remedios de Amor y de allí saca las palabras que le cuenta a Sempronio.
“¿No sabes que alivia la pena llorar la causa? ¿Cuánto es dulce a los tristes quejar su pasión? ¿Cuánto descanso traen consigo los quebrantados suspiros? ¿Cuánto relievan y disminuyen los lagrimosos gemidos del dolor? Cuantos escribieron consuelos no dicen otra cosa.”

SEMPRONIO
Sempronio dice:
“Lee más adelante; vuelve la hoja; hallarás que dicen que fiar en lo temporal y buscar materia de tristeza que es igual género de locura. “
“Finge alegría y consuelo, y serlo ha.”
El consejo de Sempronio parece inspirarse también en Ovidio (remedios de amor: “quien pueda fingirse sano sanara”)

       4. ¿Qué dos actitudes manifiesta Pármeno en torno al asunto que ocupa a su amo?
Primera actitud
Le dice que hizo mal en dar el dinero a Celestina porque a quien das el dinero y le dices tu secreto das tu libertad. Primero Pármeno parece el criado fiel, con sentido común…
Segunda actitud
Ve que por ser leal sale mal parado y decide hacer todo lo que le dice su amo sin rechistar, aunque le este mintiendo.

     5.¿Qué motiva este cambio de actitud?
Que Calisto le dice a Pármeno que así no le ayuda que necesita apoyo como se lo da Sempronio.  Pármeno se siente desplazado y por eso cambia su actitud.

    6. ¿Qué nombre darías al sentimiento que Pármeno manifiesta por Calisto al final del segundo auto?
Un sentimiento de decepción porque él intenta ser fiel y en cambio sale perdiendo.

El primer auto no es de Fernando de Rojas


Hay dos razones principales que nos hacen pensar que el primer acto de La Celestina no está escrito por Fernando de Rojas. Uno son los neologismos y el otro los errores de lectura.

Neologismos: (Vocablo, acepción o giro nuevo en una lengua)
La palabra “desde” (preposición) se decía, antiguamente, “dende”. En el primer acto, aparece solo la parece dende y en los otros, desde. La palabra "grande" se decía; "grand". "Nosotros" era "nos" y "vosotros", "vos". De Rojas tenía una mentalidad más moderna y utilizó las nuevas palabras.

Errores de lectura:
En el texto aparecen errores de lectura como: en vez de utilizar la palabra “Maron” utiliza la palabra “mayor”. El texto entonces queda así: Mas dí, como mayor, la fortuna ayuda a los osados. Cuando en realidad lo que quiere decir es: como dijo Maron, la fortuna ayuda a los osados. 

Diferencias entre la Celestina y Trotaconventos


En esta publicación vamos a ver las principales características que mantienen la Trotaconventos  y Celestina. La Trotaconventos es un personaje que sale en el “Libro de Buen Amor” escrito por el Arcipreste de Hita (S.XIV). Su nombre verdadero en la novela es Urraca. La Celestina como bien sabemos sale del libro de Fernando de Rojas (S.XV).
Ambos personajes tenían el mismo oficio: alcahuetas. La gente recorría a ellas para arreglar sus problemas amorosos.

La Trotaconventos:
Iba de convento a convento llevando mensajes de amor de señores a las damas religiosas. Era una mujer fiel, pícara, que sabia mentir y ocultar secretos hábilmente. Llevaba rosarios y sabia consejas. Era andarina, sabía ir por las calles de las ciudades y no era ni lenta ni torpe. Usaba el encanto para engañar.
Respecto sus oficios era herbolera (sabía de hierbas), partera (nacimiento de los niños) y alcoholera (sabia hacer perfumes y maquillajes. Se dedicaba al mundo de la cosmética).

La Celestina:
Era una mujer viuda, muy pobre y que se ganaba la vida como podía. Tenía las mismas características que la Trotaconventos pero además hacia hechicería, abortos y reparaciones de himen. Sabía coser muy bien.
Ambas están orgullosas de su oficio.

La Celestina, primeros autos y personajes

Después de comentar un poco la estructura de la novela y ver un poco la vida de su autor, deberíamos empezar a centrarnos en los personajes principales. El protagonista es Calisto, toda la historia se mueve a su alrededor. Su amor hacia Melibea hace que ella también sea una de los personajes más importantes juntamente con Sempronio, Pármeno y Celestina. Finalmente tenemos a Elicia, Areúsa, Pleberio, Lucrecia y Alisa como personajes secundarios.
Calisto, nuestro protagonista es un señor de condición noble mediana que se enamora locamente de Melibea, una mujer muy ilustre y de elevada a la máxima dignidad a causa de la próspera situación. Ella lo rechaza y Calisto esta tan triste y tiene tanto deseo hacia ella que es capaz de morir.
Calisto habla con Sempronio, su criado. Este le ayuda a intentar olvidar a Melibea con argumentos misóginos (mostrando un odio hacia las mujeres).  Un ejemplo de argumento que le da es que los hombres son superiores a ellas y por lo tanto no deben sufrir. Sempronio no puede convencer a su amo de que Melibea no es tan perfecta como Calisto piensa. Él la ve con ojos alindes, la tiene como una diosa y debe cambiar su punto de vista. Para esto Sempronio nombra a Celestina y va en busca de ella porque es la que puede ayudar a Calisto para su mal de amores.

*Pármeno: es el otro criado de Calisto
*Elicia: hija de Celestina y pareja de Sempronio
*Areúsa: prima de Elicia
* Pleberio y Alisa: padre y madre de Melibea
*Lucrecia: criada de Pleberio 

En la primera parte de la Celestina ya podemos observar la relación que tienen amo y Criado. Es totalmente diferente a la relación medieval. Antes los criados y amos se trataban muy bien y eran muy fieles ya que convivían juntos hasta que morían. Se ayudaban mutuamente y casi no había diferencias entre ellos. En cambio en la Celestina podemos ver una relación totalmente distinta. La principal diferencia es que hay un sueldo entremedio y esto hace que el amo trate mal al criado y que el criado critique al amo a sus espaldas. 

dimecres, 31 d’octubre del 2012

"La Celestina"


Como que Calisto está enfermo de amor por Melibea, su criado Sempronio trata de consolarle dando argumentos negativos en contra de las mujeres.

Entre estos argumentos, Sempronio:
- Menciona la imperfección de la flaca mujer, contraria a la perfección del hombre.
- Dice que las mujeres, junto con el vino, son los dos elementos que hacen renegar a los hombres.
- Cita el mito de Adán y Eva para que Calisto vea que las mujeres son el mal.
- Por otro lado, también tiene en cuenta que hay mujeres santas, pero las otras actúan con maldad.
- Las mujeres, según Sempronio (que se basa en autores importantes), obran sin pensar, engañan, mienten, son ingratas, lujuriosas, soberbias, hechiceras, no tienen vergüenza, están locas... las considera una plaga.

Flores y Blancaflor


Durante la Edad Media (s. XII-XIV) hubo un seguido de novelas sentimentales que circularon por las cortes de Europa. Entre ellas encontramos la novela de “Flores y Blancaflor”.
Resumen:
Flores es hijo de un rey moro de España. Está enamorado de la hija de una esclava cristiana, Blancaflor. Los dos eran nacidos el mismo día, con unos mismos rasgos: igual de guapos, de listos… y crecen juntos. Durante su adolescencia, aparece el amor (vemos que el amor no tiene fronteras) y en enterarse su padre, el rey, vende a la esclava que llega al mercado de Babilonia, y Flores va en su búsqueda. Viven un viaje de regreso juntos, y al llegar a España, su padre (el rey) ha muerto y él es coronado rey. Entonces se convierte en cristiano y se casa con ella.
En este pequeño relato de “Flores y Blancaflor”, vemos con mucha facilidad que en las novelas sentimentales, el amor es el elemento principal y más importante (si que el caballero librará batallas, guerra… vivirá una aventura) pero todo será por amor, querrá recuperar a su amada y deberá ir a buscarla. Por eso decimos que el amor no tiene fronteras, el personaje hará todo y más por su amada, por amor.
Van habiendo cambios en los espacios… Empiezan a aparecer dentro de la novela francesa, dentro de la historia, de las ciudades que cobran un papel más importante respecto a las cortes (que eran el principal espacio en las novelas de caballerías).
Con estos cambios empiezan a aparecer nuevos novelistas como Jean Renart. Nacido a principios del  XIII, fue un poeta francés. Su vida es aún muy desconocida, pero se le atribuye la composición de la novela “Galeran de Bretaña” y se sabe que fue el autor de “El milenio” (del año 1200) y el “Guilleaume de Dole” (del año 1210). Su obra maestra es, sin lugar a dudas, el poema narrativo “El lai de la sombra” (1221).

La novela sentimental


Entre los escritos que se leían en la Edad Media, se destacan cinco variedades: las novelas de caballerías y las novelas sentimentales, que eran lo novedoso de la época. También había relatos de la antigüedad greco-latina, relatos religiosos como la vida de santos, sermones, historias bíblicas, etc. Y por último había cuentos y leyendas, que se transmitían oralmente y escritas. Las escritas venían de tradición oriental u occidental, y en esta vertiente podemos destacar a Esopo como escritor de las leyendas occidentales.
La novela sentimental es un subgénero literario histórico que se desarrolla en el Prerenacimiento del siglo XV y el Renacimiento de la primera mitad del siglo XVI. Se compone en prosa con versos intercalados, a veces en forma epistolar; posee temática amorosa, frecuentemente dentro de las leyes del llamado amor cortés.
De las novelas sentimentales podemos encontrar Tristán e Isolda como una de las más importantes de la época:

Resumen de la novela sentimental Tristán e Isolda:
Tristán es el fruto de los amores del rey de Cornualles, que se enamora de la reina Leonire.
Es cuidado por su tío, el rey, que lo trata como si fuera su propio hijo. Tristán es muy bueno en la música, en concreto con su arpa, pero la historia empieza cuando un gigante Irlandés llega para que le paguen con doncellas y hombres hasta que alguien le plantara cara y ganara.
Cuando Tristán llega a la edad suficiente para luchar contra el gigante, gana, pero ambos quedan mal heridos. El gigante se vuelve a Irlanda y es cuidado por su sobrina, Isolda, por la quién está enamorado, pero a pesar de sus cuidados, el gigante muere. Isolda encuentra un fragmento de espada del oponente en su cabeza, y decide guardárselo.
Por otro lado, Tristán también está muy mal herido, tanto que no le encuentran solución y él accede a que lo dejen al mar con una barca y su arpa. Llega a las costas de Irlanda, y, haciéndose pasar por un juglar, se hace famoso tocando su arpa hasta llegar a los oídos del Rey, que manda que su hija lo cure. Esta lo hace, y Tristán vuelve a Cornualles, dónde su tío, aún soltero, ve por arte de magia unos cabellos rubios, y afirma que se casara con la mujer de estos cabellos. Tristán, que conoce a la persona que tiene estos cabellos (Isolda, la rubia) vuelve a Irlanda para pedir la mano de ella para el Rey. Al llegar se encuentra un dragón que ataca al pueblo, pero él lo mata cortándole la lengua. Como ésta tiene poderes mágicos, deja inconsciente a Tristán, y un forastero que pasaba por allí recoge la lengua y la lleva al Rey para pedirle la mano de Isolda, la rubia. Esta, que no se cree que lo haya matado el forastero, va a ver la escena del dragón y encuentra a Tristán tendido. Y es entonces cuando comprueba que el fragmento de la cabeza del gigante es el que falta en su espada. Isolda lo perdona y lo cura, y Tristán le dice que su tío le pide la mano. Antes de partir a Cornualles, la madre de Isolda hace unos brebajes para que cuando llegue a ver el Rey de Cornualles se lo tomen los dos y queden enamorados para siempre. Pero en el viaje, por error, Tristán bebe un brebaje y Isolda el otro, y se enamoran perdidamente. Al llegar al destino, se separan y se van viendo a escondidas. Y un enano, para probar que Tristán visita Isolda por las noches, deja harina y esta se mancha de sangre de Tristán al saltar de una ventana a otra. Para probar que no eran amantes, Isolda jura que solo ha tenido dos hombres entre sus piernas. Uno fue el Rey, y el otro el juglar que le ha ayudado a cruzar la calle cuando estaba toda mojada (el juglar era Tristán, para así burlar la ley). El Rey no se lo cree del todo y Tristán huye lejos, a un castillo. Allí se casa con Isolda de las blancas manos, pero con un voto de castidad porque está enamorado de Isolda, la rubia. Y cuando se pone enfermo, dice que solo hay una mujer que pueda curarlo: Isolda, la rubia. Pide que si el barco que vendría de Cornualles llevaba Isolda, tendría las velas blancas. Si no venía, las tendría negras. Y cuando este se acerca, Tristán pregunta de qué color son las velas y le responden que son negras. Seguidamente, Tristán se muere de tristeza. Y cuando Isolda la rubia llega al castillo y lo ve muerto, también muere de pena.

El libro del caballero Zifar


El Libro del caballero Zifar  es el primer relato de aventuras de ficción de la prosa española, y fue escrita hacia el año 1300 (s. XIV) por Ferrand Martínez, clérigo de Toledo, que aparece en un cuento del prólogo. Se basa en elementos combinados que dan originalidad, como leyendas cristianas, árabes consejos de carácter moral (filósofos clásicos) y consejos didácticos, y por eso sirvió de lectura educativa para algunos nobles.
Hay también un escudero, muy parecido a Sancho Panza del “Don Quijote de la Mancha”, con rasgos parecidos (regordete, es fiel a su señor, es de un estatus social muy bajo…).
Se puede ver en esta obra que el caballero se idealiza, el amor tiene un papel muy importante, y el problema causante del argumento de la novela es un maleficio (caracteres mágicos).

Resumen:
Zifar era un noble con muy mala suerte que vivía en la India, con su esposa Grima y sus dos hijos. El caballero tenía una maldición en la que al cabo de diez días de poseer un caballo, este se le moría, y el Rey lo echó del reino por miedo a su maldición. Esta maldición la causó un antepasado suyo muy malo, y para que deje de obrar la maldición y desaparezca, el caballero tiene que hacer bondad para compensar su linaje. Durante el transcurso de la novela pierde a sus dos hijos (uno en el bosque, se lo lleva un león, y el otro se pierde entre la multitud de personas. Luego, en la ciudad, unos marineros lujuriosos se llevan a Grima en un barco, secuestrada. Pero ella, cuando es raptada, ve como todos los piratas se matan unos a otros, hasta que solo queda ella a bordo, con todo el botín. Y, rezando a la virgen, el barco llega a la costa, donde Grima construye un monasterio con las riquezas del barco, y empieza a tener fama de mujer sabia. Mientras, Zifar logra vencer al enemigo y pone paz. Por su logro, el rey le ofrece la mano de su hija, por lo cual él se convierte en el nuevo monarca. Él acepta, pero con voto de castidad para no ser infiel a su mujer. Grima y sus hijos, justamente llegan a la misma región que el caballero, pero no quieren que la gente sepa su relación familiar, porque se debe aceptar el destino. Y toda la familia vuelve a estar reunida.

El origen de la novela


El género literario de las novelas fue una lectura de ocio de las mujeres en la edad media. Al siglo XI cambiaron el código latín por otros idiomas, como pueden ser el francés, el castellano o el catalán. Al siglo XIII, Carlomagno da luz a una idea en que quiere gobernar por igual a todos sus territorios. Empieza a haber una nueva clase (ni clero, ni gobernantes) que accede a la escritura y lectura en otras lenguas que no sean el latín. Además, algunos reyes impulsan su utilización. No hay procedencia clásica.

El origen de las novelas se retrasa al siglo XII, cuando Normandía estaba gobernada por una corte de Enrique II Plantagenet (que accedió al trono en 1153) y Leonor de Aquitana, antigua reina de Francia. Normandía, en la segunda mitad del siglo XII, era una zona muy culta, y cuando estos invadieron el sur de Inglaterra, llevaron toda su cultura allí. Los anglosajones, para contrarrestar los productos franceses, crean una historia británica ficticia. Historia Regum Britanniae, escrita en latín entre los años 1130 y 1136 por el monje galés Godofredo de Monmouth, cuenta una historia de la antigua Britania. A pesar de estar mayormente inventada, es una valiosa obra de literatura medieval, que contiene la más antigua versión conocida de la historia del Rey Lear y sus tres hijas, y ayudó a que los lectores que no hablaban galés conocieran la leyenda del rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda. Este tipo de narraciones con apariencia histórica y mezclas de la realidad con la ficción (mitología, historia, leyendas y tradiciones anglosajonas) se denominan pseudohistorias.

En el siglo XIII se edita la Bulgata Arturica, que es un conjunto de novelitas anteriores, gracias a la invención del papel, ya que no es tan caro como el pergamino. Las novelas de este conjunto tienen un argumento similar, siempre siguiendo este esquema: un caballero de oscuros orígenes tiene que saber de dónde proviene, tiene que encontrar su verdadera identidad que ha sido escondida. El caballero acostumbra a ser valeroso, intrépido, maneja muy bien las armas y es un buen cristiano. Conoce a una dama a la que tiene que conquistar, y usualmente lo hace. En el hilo de la novela pasan muchas batallas, para demostrar lo poderoso que es el protagonista, siempre a medio camino del final original, encontrar su identidad verdadera.

Las características de estas novelitas son que todas tienen aventuras itinerantes, es decir, una estructura arbórea que siempre desemboca a un final normalmente favorable. Se destacan las virtudes caballerescas del protagonista, con batallas y muestras de valor. También hay magia en las características de estas obras. Hay amor en la trama, siempre se tiene que conquistar a una dama.

En las novelas de caballerías hay una manera de proceder en cuánto al amor que tienen directamente que ver con la obra de Ovidi, Ars amandi (El Arte de Amar). En aquella época tenía que haber un período de observación a distancia que procede a la especulación antes de la declaración, pero aún antes de esta tenían que venir los tanteos y descubrir si ambos amantes se correspondían. El amor perfecto no es el amor carnal ni físico, se creía que el amor perfecto era el espiritual (el intercambio de cartas de amor y cortejo). En el amor considerado perfecto no importa si se corresponde, sólo si se es fiel.

El amor apasionado, en la Edad Media estaba considerado como una enfermedad. Se imprimía la imagen de la amada en el cerebro y no se podía olvidar su rostro. Siempre pensaba en ella, hasta no comía y se cerraba en banda. Este amor se encuentra en poesía trovadoresca sentimental, en las novelas sentimentales, como Tristán e Isolda.

El origen de las novelas se retrasa al siglo XII, cuando Normandía estaba gobernada por una corte de Enrique II Plantagenet (que accedió al trono en 1153) y Leonor de Aquitana, antigua reina de Francia. Normandía, en la segunda mitad del siglo XII, era una zona muy culta, y cuando estos invadieron el sur de Inglaterra, llevaron toda su cultura allí. Los anglosajones, para contrarrestar los productos franceses, crean una historia británica ficticia. Historia Regum Britanniae, escrita en latín entre los años 1130 y 1136 por el monje galés Godofredo de Monmouth, cuenta una historia de la antigua Britania. A pesar de estar mayormente inventada, es una valiosa obra de literatura medieval, que contiene la más antigua versión conocida de la historia del Rey Lear y sus tres hijas, y ayudó a que los lectores que no hablaban galés conocieran la leyenda del rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda. Este tipo de narraciones con apariencia histórica y mezclas de la realidad con la ficción (mitología, historia, leyendas y tradiciones anglosajonas) se denominan pseudohistorias.

La novela escrita por el monje fue tan popular que se tradujo al francés, inspirando a los Normandos a crear “El caballero de la Carreta”. Chrétien de Troyes y Maria de Francia, ambos eruditos, crearon pequeñas y costosas obras, ya que el pergamino no era barato. Usaban borradores de cera e oveja, y tardaban más en escribir libros.

En el siglo XIII se edita la Bulgata Arturica, que es un conjunto de novelitas anteriores, gracias a la invención del papel, ya que no es tan caro como el pergamino. Las novelas de este conjunto tienen un argumento similar, siempre siguiendo este esquema: un caballero de oscuros orígenes tiene que saber de dónde proviene, tiene que encontrar su verdadera identidad que ha sido escondida. El caballero acostumbra a ser valeroso, intrépido, maneja muy bien las armas y es un buen cristiano. Conoce a una dama a la que tiene que conquistar, y usualmente lo hace. En el hilo de la novela pasan muchas batallas, para demostrar lo poderoso que es el protagonista, siempre a medio camino del final original, encontrar su identidad verdadera.

Las características de estas novelitas son que todas tienen aventuras itinerantes, es decir, una estructura arbórea que siempre desemboca a un final normalmente favorable. Se destacan las virtudes caballerescas del protagonista, con batallas y muestras de valor. También hay magia en las características de estas obras. Hay amor en la trama, siempre se tiene que conquistar a una dama.

En las novelas de caballerías hay una manera de proceder en cuánto al amor que tienen directamente que ver con la obra de Ovidi, Ars amandi (El Arte de Amar). En aquella época tenía que haber un período de observación a distancia que procede a la especulación antes de la declaración, pero aún antes de esta tenían que venir los tanteos y descubrir si ambos amantes se correspondían. El amor perfecto no es el amor carnal ni físico, se creía que el amor perfecto era el espiritual (el intercambio de cartas de amor y cortejo). En el amor considerado perfecto no importa si se corresponde, sólo si se es fiel.

El gran éxito de Chrétien de Troyes llega a la Península, gracias a las traducciones del fracés al castellano, y inspira a algunos escritores obras propias como Gran conquista de Ultramar (1291-1295), Libro del caballero Zifar (1300) y Amadís de Gaula (s. XIV).

dimecres, 10 d’octubre del 2012

Introducción

Este blog se ha creado para la asignatura de lengua castellana, para completar los apuntes de clase, y para completar el trabajo hecho en casa. Es un blog muy útil y muy interesante.